Cuentan que le preguntaron a Guayasamín, pintor ecuatoriano, cuánto tiempo llevaba pintando, y el maestro, pensándolo unos segundos, respondió: -Llevo pintando tres mil o cinco mil años, más o menos.
"No señor... yo no sé hacer nada más que pintar. Creo que no hubiera podido ser nada más que pintor".
"Vengo pintando desde hace tres o cinco mil años, más o menos".
"Mi pintura es para herir, para arañar y golpear en el corazón de la gente. Para mostrar lo que el Hombre hace en contra del Hombre".
"Estoy en el mismo punto, pero cada vez más hondo. Siempre golpeando hacia adentro".
"Pintar es una forma de oración al mismo tiempo que de grito. Es casi una actitud fisiológica, y la más alta consecuencia del amor y de la soledad".
"Soy consciente de que venimos de una cultura milenaria, alrededor de la cual se formó una civilización que alcanzó momentos de gran esplendor".
"Pese a todo, no hemos perdido la fe en el hombre, en su capacidad de alzarse y construir, porque el arte cubre la vida. Es una forma de amar".
"La Capilla del Hombre es un llamado a la unidad de América Latina: de México a la Patagonia, un solo país".
"Mi obra en verdad son tres sinfonías que había diseñado en mi juventud y que estoy cumpliendo día a día"
1 comentario:
Por fin algo de arte...
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